martes, 20 de noviembre de 2012

Demian, de Herman Hesse

¿Cómo me puede gustar tanto este libro?
Acabo de terminar hace unas semanas su relectura, que no será la última, y ya estoy deseando volver a leerlo. Cada vez encuentro más ideas dentro. Hay referencias filosóficas, religiosas, humanas...
Pese a ser escrito a principios del s. XX es más actual que nunca. Esa búsqueda en el interior de uno mismo, escuchar nuestra propia voz, salirnos del rebaño... el coaching no hace más que repetir cosas parecidas, que no son nuevas.
Emil Sinclair narra el paso de su infancia a la adolescencia y juventud, los sufrimientos y dudas, la búsqueda de sentido y de dirección en la vida. La crisis de identidad del personaje por la que pasamos todos, se cuestiona la fe y sufre en este proceso de madurez, como el pájaro que tiene que romper el cascarón para nacer (imagen repetida a lo largo del libro). Sufre acoso escolar hasta que aparece un compañero, Max Demian, cuya madurez le abre los ojos a otro mundo. Tras un distanciamiento entre ambos y un periodo en que Sinclair da tumbos, Beatrice se convierte en su amor platónico y le saca de una vida disipada y de alcohol. Pistorius es un personaje que filosofa mirando al fuego y entra en la vida de Sinclair tocando el órgano. Un aspirante a mesías frustrado cuyas teorías esotéricas presentan a Emil al demiurgo Abraxas.
Es una novela de formación o Bildungsroman. Experimenta lo difícil que es no seguir a la manada -o al rebaño- y tener personalidad e ideas propias.
Se nota la influencia de la India en el autor, tanto por lo que le transmitieran sus padres como por sus propios viajes. Así encontramos referencias a la meditación y al om, por ejemplo. También es inevitable ver el yin-yang en Abraxas -un dios que incluye al diablo- y la rebelión del individuo contra la masa.
De hecho, Herman Hesse ha aportado mucho de su vida al personaje. Quien lea su biografía  reconocerá un cierto paralelismo con la estricta educación familiar, sobre todo del padre, la influencia del novedoso (por entonces) psicoanálisis (Hesse acudió a sesiones con un discípulo de Jung). Así no es de extrañar las continuas alusiones a los sueños. 
Pero hay más, un complejo de Edipo en su relación con Frau Eva y Max Demian, que acaba con el segundo en la Gran Guerra.
Presenta un concepto llamativo: el estigma de Caín, que es una marca que sobrevuela a los personajes. Algunos personajes históricos la tuvieron: Napoleón, César, Jesucristo, Nietzsche... Es casi lo contrario, un don.
La muerte para que haya vida, otro concepto del fluir, la catarsis, la ruptura del cascarón o la crisálida.
En resumen, una novela muy completa y con demasiadas referencias para resumirlas por encima. Se trata de un libro condensado de pensamientos, sentimientos y sueños...



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